Discriminación contra las mujeres en campañas federales
El sexismo y la discriminación de género siguen siendo una forma de pensar y de expresarse sumamente arraigada en México, a pesar de los esfuerzos realizados por distintas instituciones federales y por organizaciones no gubernamentales que han asumido el compromiso de abordar estos temas y buscar mecanismos para prevenir que se sigan promoviendo valores sexistas.
Uno de los organismos que más han trabajo al respecto ha sido el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), el cual publicó a principios de 2012 un estudio realizado en colaboración con la Secretaría de Gobernación y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, en el cual queda de manifiesto que no sólo la publicidad comercial pagada por los particulares y las empresas está cargada de mensajes discriminatorios contra la mujer; también con el presupuesto público se hacen comerciales y propaganda oficial que puede ser considerada discrminatoria.
En dicho estudio fueron examinados 338 anuncios (correspondientes a 50 campañas del Gobierno federal) publicados en medios impresos y difundidos por radio y televisión. Después de una observación minuciosa, los integrantes del comité de estudio llegaron a la conclusión de que sólo uno de cada cuatro anuncios no presentaban mensajes sexistas o discriminatorios.
Las campañas que se revisaron correspondían a los años 2009 y 2010, y provenían de distintas instituciones federales como las Secretarías de Salud, Hacienda y Crédito Público, y la de Seguridad Pública; también se tomaron en cuenta los anuncios de la Procuraduría General de la República.
Por otra parte, la Comisión Nacional Para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim) también ha contribuido en la lucha contra la discriminación y la violencia. Entre sus actividades, destaca la realización de un Manual para el Uso no Sexista en el Lenguaje, dirigido sobre todo a funcionarios y servidores públicos. En dicho manual se hace referencia a frases y expresiones que deben ser evitadas ya que están cargadas de contenido agresivo que atenta contra la dignidad de las mujeres.
Palabras de uso común como “vieja” y frases como “si quería trabajar, para qué tuvo hijos” están incluidas en el manual como parte de lo que se debe erradicar en el lenguaje de las figuras públicas de los ámbitos federal y estatal.
La finalidad de las campañas para combatir la violencia contra las mujeres es deshacerse de patrones de conducta – algunos muy arraigados en la cultura mexicana – que representan una amenaza para la dignidad de las mujeres, así como una limitación para que participen en la vida pública y profesional.
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